Para que las tribulaciones legales, además de ser un quebradero de cabeza, no te hagan un roto al bolsillo, recuerda que existe el seguro de defensa jurídica. Este seguro sirve tanto para que te defiendan en un juicio como para que puedas reclamar una indemnización a quien te haya causado daños. Asimismo, también cumple una función de puro asesoramiento, es decir, para resolver tus dudas que se te planteen en temas jurídicos.
En muchas ocasiones, esta cobertura se contrata como un complemento de otras pólizas. Lo más frecuente es que se suscriba como un extra el seguro del coche. De hecho, cuatro de cada cinco conductores lo adquieren. Pero también es muy común como plus al seguro del hogar. No en vano, la movilidad y la residencia son dos ámbitos donde es particularmente fácil acabar contrariado con otra persona. En estos casos, la defensa de tus intereses en el juicio o reclamación, la suele asumir la aseguradora, designando sus propios abogados y procuradores y, solo en el caso de que haya conflicto de intereses con la aseguradora, podrías nombrar tus propios abogados y ella asumiría el coste de sus minutas hasta el límite establecido en la póliza.
Pero también seguros de defensa jurídica por así llamarlos “puros”, esos que no están ligados a ningún otro seguro. Quiénes compran este tipo de productos lo hacen porque quieren tener una protección de sus gastos jurídicos. Lo mismo piensas “yo esto no lo necesito”. Pero echa la vista atrás y piensa en todos esos líos que has tenido en el pasado donde hubieras agradecido tener una asistencia legal. Cuando este seguro se contrata de forma específica, lo habitual es que puedas designar a tus propios abogados y procuradores, asumiendo la aseguradora sus minutas hasta los límites pactados en la póliza. Por regla general, estos son más elevados que cuando se trata de una simple cobertura de defensa o de reclamación de daños.
El gasto de las familias durante 2021 en servicios jurídicos y contables fue de 2.163 millones de euros. Esta cantidad se compara con 75 millones de primas del seguro de asistencia jurídica, de donde se deduce que el papel de éste en el presupuesto jurídico-contable de las familias es del 3,5%.
El seguro de defensa jurídica te permite cerciorarte de que tienes en cualquier momento y ante cualquier situación asistencia legal para lo que te pueda hacer falta. Desde un trámite insustancial ante la Administración ante situaciones verdaderamente peliagudas.